En mi barrio las señoras se reunen cada mes para celebrar los cumpleaños, y por azares del destino, he asistido a esas reuniones en las ultimas dos ocasiones, y me han encantado.
Además de una sabrosa comida y música, lo más valioso es por que me han hecho reflexionar muchísimo, de lo que es importante, de lo que vale cada dia y de lo superficial que nuestra vida se vuelve si no tenemos esos instantes para evaluar, balancear y seguir.
Son mujeres que su experiencia es muy valiosa para todas nosotras, han probado y fallado, han alcanzado sus metas, y se sienten contentas y satisfechas de su vida; y por ello, cada dia es ganancia para ellas. Alli están con sus quebrantos de salud pero listas y dispuestas a echarse una bailadita, a tomarse una sangría y a reirse a todo pulmón.
Por lo que son fiel ejemplo, que el espíritu nunca envejece, es nuestra mente la que pone los límites de edades, de lo que puedo y no puedo hacer, asi que debemos estar pendientes de ello.
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